Si el ordenador que usas habitualmente ha ido perdiendo rendimiento y comienza a comportarse con mucha lentitud en los procesos, tienes que tener en cuenta que existen una serie de factores que pueden estar provocando que el PC esté lento, y en la mayoría de los casos tiene solución.
Esta lentitud puede deberse a falta de memoria RAM, problemas en el arranque del sistema, software innecesario, drivers y controladores sin actualización, deterioro en el registro de Windows, archivos basura, problemas con el disco duro, …